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jueves, 8 de septiembre de 2011

Lo bueno de lo malo

A nadie le gusta sufrir, sea por lo que sea. Sin embargo, es imposible evitarlo. Tarde o temprano, todas las personas, tienen verdaderos problemas. Y es justo entonces, cuando tienes que tomar una decisión: venirte abajo y continuar sufriendo, o luchar contra ello. Lo malo es que esta decisión es involuntaria, está claro que nadie se rinde ni elige pasarlo peor a proposito.

Lo mejor para salir adelante es valorar lo que ya que tenemos  y sentirnos afortunados por ello; aunque ésto es muy difícil en el ser humano. Otra solución puede ser marcarse nuevos retos cómo distracciones, y es que, la ilusión es el primer paso para conseguir cualquier cosa y sobreponerse a lo pasado.

Afortunadamente, hay muchas cosas buenas en la vida: la familia, los amigos, la música, la religión (para el que sea creyente), el contacto con la naturaleza.... Si se contrarrestan los momentos desagradables con algo de ésto, el resultado puede ser positivo.

Lo único que no se puede cambiar es el pasado. Yo, por eso, siempre que tomo una decisión  la pienso lo máximo posible, y si estoy luchando por llegar a una meta, pongo todo lo posible de mi parte. Así, sé que si me equivoco, no ha sido por no implicarme. Simplemente, no ha habido suerte. Las cosas no han salido cómo esperaba. Con esto, logro algo muy importante, no sentirme culpable ni fracasado conmigo mismo.

Y para acabar, me gustaría añadir que después de haber pasado una mala racha se aprenden cosas y además, se coge cierta "invulnerabilidad". Y si no: piensa por un instante en alguna cosa mala que te haya pasado hace mucho tiempo. Despúes de haberlo superado. ¿no crees que si te volviera a ocurrir algo parecido, estarías más "preparado"?. Es lo bueno de lo malo.

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